De tanto rascarte, ahora me picas.
Te entré por la salida de emergencia
y ahora salgo por la entrada principal.
Puede que llegara a tocar el cielo con los dedos de los pies.
Tal vez alguna vez en la cama de tu nave especial.
Falló el mecanismo y caímos en arenas enfermizas.
Siempre te faltó una tuerca y te sobraron dos tornillos.
Yo no soy rana ni me convierto en princesa.
Si visto de corto eres mi medio limón.
Pero yo no soy el tuyo.
¡No hagamos el amor!, que estamos en guerra.
¡Ni pipas ni palomas de la paz!
De los hechos a las palabras: autopistas.
A palabras necias: amor ciego.
¡Lágrimas de rana!
Lloras como un sobao pasiego.
¿Románticos haciendo de zorros?
¿O zorros haciendo de románticos?
¡Lágrimas de rana!
¡No hagamos el amor!, que estamos en guerra.