Pienso en
escribir. Pienso en qué escribir. Pienso en ti, en mí, en él, en ella, en los demás. Pienso en todo lo
que he dicho hoy y en todo lo que he oído hoy, y en las caras de la gente que me ha hablado y escuchado; y
en las caras de otra gente con la que no he cruzado palabra. Pienso en lo que
iba a hacer y no he hecho. Luego pienso que ‘pienso’ es polisémica. Me reto a descubrir
otras polisemias. Órgano. Cola. Manzana. Cámara. Pico. Pienso en qué cosas podría haber
pensado mientras jugaba a polisemias. Pienso en mañana. ¡Mañana! Otra para el
saco. Pienso en qué haré mañana. Pienso en ti, en mí, en él, en ella, en los demás. Pienso en todo lo
que diré mañana…